Seguimos
juntos,
porque el potro arisco que hay en mi
junto a ti se amansa,
o quizás por que conmigo
cede tu arrogancia.
Yo no lo sé
el caso es que vamos juntos.
Seguimos juntos,
por que he puesto muchas veces
ganas de mi parte,
y otras tantas en verdad,
estaba a punto de matarte.
Que absurda necia y
loca forma de adorarse.
Seguimos juntos,
porque de ti aun sigo
bien enamorada.
Nos entendemos
al calor de una mirada,
y mientras sea así
tu yo seguimos juntos.
Seguimos juntos,
aunque no es fácil
olvidar los sinsabores.
Cuando hay un corazón amante
no hay rencores.
Es la razón,
y el porqué seguimos juntos.